Reseña ¿Quién mató a Cristián Kustermann?
¿Quién? o más bien ¿por qué? ?
Como es el mes de la patria en mi país, no podía dejar de leer al menos a un autor chileno ??. Asi que para la primera semana de septiembre elegí leer una novela corta de Roberto Ampuero.
Cayetano Brulé es un detective privado, nacido en Cuba, pero actualmente residente de Valparaíso. Aunque, en general, solo se ha dedicado a casos modestos, un día todo cambia: un adinerado hombre de negocios lo contrata para que averigüe la verdad sobre la muerte de su hijo, Cristián Kustermann, asesinado repentinamente. Pero no hay culpables ni sospechosos… solo rumores.
Así, el detective debe hacer lo posible por unir los cabos del misterioso pasado de un joven cuya vida está caracterizada por romances fugaces, la política y los extremos.
Una novela de trama lineal, rápida y que va directo al grano. No hay grandes descripciones ni diálogos tediosos, solo la introducción de personajes y conversaciones que están dirigidas, en el contexto de Chile post regimen militar, a responder la única gran pregunta: el título de la novela.
El problema es que creo que este es algo confuso. Por supuesto, no sabemos con certeza quien mató a Kustermann durante toda la novela, pero desde las primeras páginas hay indicios que apuntan al responsable, lo que hace que el “gran final” no sea realmente una sorpresa. La verdadera interrogante y donde está el suspenso, diría yo, es en la pregunta: por qué X (para evitar spoilers) asesinó a Cristián Kustermann.
Más allá de esta cuestión, es entretenido teorizar acerca de la verdad del asesinado-personaje principal y leer entre líneas de los diálogos que tiene Cayetano Brulé con las más diversas personas, esperando que a alguno se le escape el secreto.
Tampoco puedo dejar de mencionar el bonito paralelo que realiza el autor entre Chile-Alemania-Cuba; países que, pese a sus importantes diferencias, entrelazan sus historias de forma muy interesante.
Recomendada para los que les gustan los misterios detectivescos y quieren una novela que no quite mucho tiempo terminar.